sábado, 11 de diciembre de 2010

Noche gris, vuelta al bar.

Ahí estaba yo, bien vestido con mis mejores pilchas. Haciéndome el galán. El que pensaba que, a pesar de todos los años, iba a alcanzar ese mañana, el mañana que soñamos. Tanto que no le prestaba atención al presente, porque estaba con el mañana. No respetaba a las mujeres por eso, solo les decía piropos, a veces groseros. En verdad, estaba desesperado, desesperado por ese mañana, desesperado y ciego, porque a la vez no me veía caer en la vejez y que ese mañana siempre es mañana, nunca hoy.

Salí como pude de ese bar, lo digo porque a pesar de ser temprano, deje la milanesa en la heladera y no hice la “base” para poder tomar. Estómago vacío no se llena con alcohol, eso dicen que es para el corazón.

Parado en esa oscura esquina, donde las luces solo eran de los autos que pasaban de tanto en tanto. Lo mismo el sonido, lo único que interrumpía el silencio era también el pasar de los vehículos. Hasta que de la nada salió un pollo. Se había escapado de un corral cercano, de esos corrales pequeños que tienen algunas casas del interior.

El pollo se me acercó y tenía una mini-campera (mini para mí, a él le quedaba bien de bien) que decía en la espalda “Born In The U.S.A.”. Lo mire a los ojos, el animal quiso cruzar mirada conmigo, pero era un pollo y los pollos solo pueden ver para los costados. Se quedo ciego de la fuerza que hizo y se termino matando, el pollo tampoco cree en la esperanzas. Una vez más el poder de la mente humana superaba a la del animal.

Tome al pollo con la campera y me lo lleve a la puerta del mismo bar donde había estado antes. Lo usaba como títere para ganar algunas monedas, cuando los viejos están borrachos festejan cualquier cosa.

Con lo ganado me tome un whisky, y nuevamente me largue de ese sitio.

Fue caminar dos cuadras y encontrarme esa gordita. La de la canción de Los Tontos, la que cortaba el vino tinto con grapa con limón. Le mostré mi pulgar para arriba para demostrarle que la reconocía. Pero seguí el viaje, si quería sexo, no quería con ella. “No era del todo fea, se parecía a John Wayne.”

Espere en la plaza, hasta que pasará el ómnibus. Cuando llego, me subí a él, me senté, arrancó y vomité la noche. No me gusta tirar todo lo logrado de una, así que me baje y volví al bar para arrancar de nuevo.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Secuestro y Liberación del Gonzo

¡Cómo me gustaba aquella guacha! ¡Fuah! ¡Me tenía loco! Era hermosa, sincera y a la vez tan perdida, se notaba a la legua que necesitaba ayuda de alguien como yo, un ser consumidor de ego, visionario que además estaba pasando por un buen momento. Ella en cambio tan oscura, mirada baja y poco motivada.

Con el tiempo le fui demostrando una mejor visión de la vida, tanto que reposaba la sonrisa en su rostro en una frecuencia diaria bastante mayor que antes. Yo, sin dudas, más me había encariñado, y ella, al parecer, también mostraba un cariño por mí, y a la misma vez, se sentía agradecida. La había rescatado de ese pozo. Era su héroe, su luz para seguir. No voy a dar más detalles, pero lo cierto es que llego un día en que nos besamos, abrazamos e hicimos todas esas cosas que dos personas hacen.

Pero al poco tiempo la cosa cambio. Ella me dijo que sentía muchas dudas y que no sabía si realmente quería estar conmigo. Ese mismo día, volví a subir a mi nivel normal la dosis diaria de alcohol que ingería antes de empezar a salir con ella. Era doloroso el sentimiento de abandono que corría por mi cuerpo, pero el alcohol en mi sangre lo intentaba disimular. (Disimular, de la Real Academia Española, dícese de cuando te pica un huevo y te rascas el otro).

En sí, parecía poder llevarlo. Hasta que me enteré que empezaba a salir con otro tipo, un tal Gonzo… y el alcohol ya no hizo milagros. Los celos empezaron a comer mi mente, y a la misma vez una rabia hacia mí mismo que me preguntaba “¿por qué avive a esa mina?”. Me sentía un “Destapa-corcho”. Hacía todo el trabajo para terminar destapando la botella y que la beba otro. Algo tenía que hacer para intentar calmarme.

Secuestre al Gonzo. Lo encerré con llave en un pequeño galpón sin luz que se encuentra en mi casa. A pesar de que grito por varios días, el no ver la luz y el poco alimento diario que le daba (constaba de ración Eukanuba para cachorros) hicieron que se cansará rápido y desistiera. Los días viernes llenaba dos baldes con agua, abría la puerta y se los lanzaba arriba, como para que se higienice un poco. No quería tampoco que el tipo hieda. ¡Ah! Por cierto, en verano también lo bañaba los martes.

La guacha no volvió nunca conmigo. Al mes de que había raptado al Gonzo, la mina ya tenía novio nuevo y yo andaba tras de otra. De por sí, luego de eso, salí con otras mujeres y algunas hasta me gustaban más que aquella. Pero no iba a soltar nunca al “ser que me quito la novia”. Todo porque no quería quedar regalado. Imagínate, lo secuestro, lo mantengo cautivo y ni así me quedé con la mujer, el tipo se iba a burlar de mí cuando se enteré lo que paso en el mundo exterior.

Pero bueno, llego un día, tras cinco años con el Gonzo de prisionero, que necesitaba el galpón para guardar unas porquerías que compre en un remate y lo liberé. Le dije, guacho la vida sigue y lo arrime con $50 hasta la ruta para que se tome un ómnibus.

Y ahora estoy en casa, tranquilo, tomando un whisky, diciéndome a mí mismo: “¡Estás pasado!”

viernes, 8 de octubre de 2010

El favor vale más que el dinero.

“La Invitación” de Buitres era el tema que entraba por mis oídos, mientras desayunaba mi café acostumbrado, más las tostadas con manteca, miel y ketchup. Aunque no debería olvidar que también comía un yogurt con cereales, un litro de jugo de naranja, algo de tocino y los restos del guiso del día anterior. El guiso era de arroz. Obvio que todo antes de las nueve de la mañana, como recomienda mi nutricionista.

Luego del desayuno era hora de ponerse a chusmear un poco por la ventana que daba para la calle, a ver que gente se había levantado a hacer lo mismo que todos los días, quien faltaba y quien había de nuevo a la vuelta. Al parecer, todo venía normal, la vieja de negro que iba a ver que sepelio se desarrollaba hoy, el canillita hablando de fútbol con la ama de casa que se dirigía a hacer las compras y de paso una quiniela para la madre, el veterano jubilado con mate que se sentaba a chusmear como yo, pero desde fuera de la casa.

En fin, parecía un día más, hasta que lo vi a él. ¡Tanto tiempo sin verlo! ¡Rubén Pelegrino! ¡Años sin que estuviera a la vuelta!... ¡Cómo olvidarlo a Rubén!, “El hombre pedazo de pan”, según la gente, era el tipo más bueno a la vuelta. Nunca le intereso la plata, sin embargo, hoy es de los tipos más ricos del país.

En su tiempo tenía un buen trabajo como administrativo en una fábrica importante de la zona. Pero su particularidad fue que, siempre que podía, le prestaba plata a la gente. Era conocido por todos, ya que, si precisabas unos mangos, sabías que Rubén te podía prestar. Además eras consciente que después no te presionaba para que se la devolvieras. Todo lo contrario, él evitaba verte. Mientras hay gente que huye de sus acreedores Rubén le rajaba a sus deudores. ¿Cómo un hombre así pudo armar su fortuna?

Fácil, a Rubén no le importaba la plata, le interesaban los “favores”. Él sabía que tras su préstamo, el otro estaba endeudado y subordinado. Le debían el favor. Algunos a los cuales les prestó tenían contactos. Contactos que lo ubicaron en buenos trabajos, que le perdonaron ciertas cosas y les sirvieron en bandeja otras. Gracias a ello, trabaja en el gobierno en un puesto que muy seguramente la mayoría de nosotros no sabe que existe. Se supo ubicar el Rubén, al parecer no tan “Pedazo de pan”.

jueves, 30 de septiembre de 2010

Vieja Burocracia

“We started nothing” de The Ting Ting sonaba en mis auriculares antes de que se gasten las baterías. Una vez así, los retiré de mis oídos. Me encontraba viajando en un ómnibus metropolitano por Montevideo y estábamos por pasar frente de la cruz que recuerda la llegada de Juan Pablo II a Uruguay.

Fue cuando una vieja empezó hablar sola y en voz alta. “¡No puede ser! ¿Cómo van a poner una estatua de un Papa negro bajo la cruz?”. Uno de los que viajaban le intento explicar: “No señora, mire, es negra por los materiales de la cual esta hecha”. “Deberían pintarla” prosiguió la vieja, “Es espantoso que sea así, una falta de respeto a su santidad”. “Bueno, señora, vaya y haga su queja”. “Eso voy a hacer” dijo por último la mujer y se bajo en la próxima parada.

Yo ese día no tenía nada que hacer y se me dio por seguirla, a ver que hacía. Fue hasta el edificio presidencial, entró y se puso a esperar que la atendieran. Luego de seis horas, le pidieron que saque número. Sacó y volvió dos días después.

Soy de esos que quiero saber como termina todo, así que también me aparecí ese día. Tras horas esperando, la atendió un tipo. Cuando la vieja le explicó su queja, el funcionario le dijo que debió ir al piso 4, no a esté. En el 4 le paso lo mismo, la enviaron al 6, de ahí al 7, del 7 al 3 y cuando completo todo el edificio, le dijeron que debía presentar su queja en la intendencia. Ya para todo esto, habían pasado unos días. En la intendencia estaban de paro, así que perdió un día más. Luego de una semana, le atendieron y le dieron un número para la otra semana. A la semana, le dieron un formulario que debía presentar otro día, o sea, debía sacar otro número para la otra semana. Cuando lo hizo, le dijeron que la queja debía ser presentada en el Ministerio de Obras Públicas. De allí, la mandaron al BPS, del BPS a la DGI, de la DGI a la OSE... a la Séptima de Libertad... a Antel... a ANCAP... a UTE... a ANEP... de nuevo a la intendencia, donde luego de varias horas haciendo cola, cuando la llamaron no respondía, estaba tiesa, sin pulso...muerta. Muerte por causa natural, o sea, murió de vieja.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Enredo

Tarareaba “El día que me quieras” de Carlos Gardel mientras caminaba a la parada del bus. Debía ir a la capital por ciertas cosas personales, que por supuesto, no son de tu incumbencia. Pero pues, mientras esperaba el ómnibus, seguía tarareando la canción. Me acordé que tenía el Mp3 en el maletín, por lo que decidí sacarlo para saciar mi deseo de tango.

Puedo parecer un tipo prolijo, pero las apariencias engañan. En el maletín se hallaba un considerable relajo, pero un relajo conocido, por eso nunca se me dificultaba encontrar las cosas en él. Tomé el Mp3 y con él venían los auriculares completamente enredados entre sí. Sería un verdadero trabajo para desenredarlos, pero como no venía el ómnibus...

Con la característica paciencia y elegancia, comencé a desenredar. Mas, ese enredo de cables, era tan inmenso que había logrado llamar la atención de las demás personas presentes. Eran tres además de mí.

Su concentración en mi lento, paciente y complejo trabajo era tal, que sus mentes fueron carcomidas por la ansiedad mientras pasaban los minutos. Dos de ellas, de la tensión, cruzaron la línea que separa la cordura de la locura. La primera, se tiro a la calle haciéndose pasar por una cebra. Otra, se desnudó, atrapó a un perro que pasaba y corrió con él a una sucursal de un banco, donde intento asaltarlo diciendo que el perro era el “Comisario Rex” y que se había cambiado de bando a causa del maltrato humano a los animales. Fue detenido por exhibicionista payaso.

Una joven de 20 años, era la tercera persona además de mí. Transpiraba, ella, de desesperación. Hasta que vio al bus que se vislumbraba en el horizonte. Entonces, saltó sobre mi, tomó mi Mp3 y con la velocidad y furia del Demonio de Tasmania, lo desenredo.

Me lo dio, se arreglo el pelo y paró al ómnibus como si nada. Al fin pude escuchar a Gardel.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

La muerte del Amor

Una vez más escuchaba “Changes” de David Bowie, desparramado del calor en la cama. El día anterior había sido de cruel invierno, frío, nublado, ventoso, lluvioso, por lo que me había acostado con varias mantas en la cama, pero por supuesto desnudo. No puedo dormir con pijama o cualquier otra ropa, soy muy liberal. Pero, recapitulando, me había abrigado de ropa de cama para amanecer con una temperatura elevada que me mostraba sudoso, pegajoso y mereciente de un baño. Cosa que hice.

Tras el baño, viche el diario y prestando más atención al pronóstico del clima en los próximos días. Daban muy buen clima, sol y altas temperaturas, en fin, muy veraniego. Al parecer el crudo, cruel invierno, había llegado a su fin. Pero, esperen… No había primavera.

Eso era un problema y empecé a hacer lo que mejor sé hacer como un uruguayo para resolver mis problemas, quejarme ante las autoridades buscando respuestas al caso y ya de paso un aumento en el sueldo para los desempleados o empleados que no van a trabajar.

La respuesta se hizo esperar, pero pronto conseguí que por cadena televisiva uno de los científicos más grandes del país y reconocido a nivel internacional (del cual por supuesto, nadie recuerda el nombre, porque no ha ido al programa de Tinelli) diera la explicación calificada a la falta de primavera. Para no sorpresa de todos, la explicación se debía al nuevo cuco de los últimos tiempos desde que el agujero de ozono fue derrotado por el Capitán Planeta, hablo del “Calentamiento Global”.

Luego, de dar el problema, tiro las distintas soluciones bla bla bla. Pero lo interesante fueron las consecuencias del calentamiento global que muchos dejábamos pasar por alto, pero sobretodo, la referida a la muerte de la primavera.

Con la muerte de la primavera, muchas especies de animales morirán debido a que copulaban en esta época. De cualquier manera, lo peor es que a quien afectaría claramente sería al ser humano, porque sin primavera sería el final del Amor con mayúscula. Con el final del Amor, el apocalipsis de los poetas y artistas sensibles, la población mundial se verá disminuida en un 55% debido a que los jóvenes no cometerán errores propios del estado de estupidez que conlleva estar enamorado. Por el lado de las mujeres, se harán las difíciles más que nunca.

De por sí, lo peor será para la gente sensible como yo. Esa gente que sabremos que el término “Amor” solo podrá ser usado como palabra de relleno en obras literarias y solo tendrá un verdadero significado en el ámbito del football.

Devuélvanme mi primavera. El poder es suyo.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Cosa Nostra

“Zapatitos de Hormigón” de El Cuarteto de Nos, escuchábamos con mi amigo, el popular Juanchi. Tirados sobre el césped del parque, disfrutando del calor de verano. “Como estaría para arrancar para el este” dijo el Juanchi. A lo que respondí, “¡Vamos ya! Contratemos un vehículo y arrancamos.” (Me la había jugado porque hacía poco cobré un dinero de un chanchullo, que no voy a contar).

Ya en el local de alquiler de vehículos, nos ofrecieron distintas opciones. Pero justo cuando estábamos llevarnos un FIAT, vemos una camioneta blindada al lado de un cajero. “¡Ese!” Señalamos con el Juanchi. El empleado del local quedo atónito, e intento explicarnos que ese pedido no se podía lograr, debido a que no era vehículo del local. Seguimos insistiendo por la blindada y no había caso. Termino llamando al gerente.

Bien con pinta de chanta, cayó el dueño del lugar. Le explicamos el problema y lo que queríamos. Y ahí fue sin decir nada. Conversó al oído al guacho que conducía el vehículo, y lo único que sé escuchó de esté fue: “Sí, dale. Total, mañana me iban a despedir”.

Con el asunto arreglado, íbamos en viaje para el este uruguayo en nuestra camioneta blindada, a puro buen rock & roll de playa. Decidimos caer por La Paloma. En donde fuimos una sensación con las minitas, a quienes les llamó la atención nuestro coche. Tres días llevábamos ahí, hasta que un día que fuimos a meter algo de playa, dos delincuentes nos asaltan la camioneta y nos dejan varados.

Sin el vehículo, se suponía que no quedaba nada por hacer. Hasta que se me prendió la lamparita y le conté un plan al Juanchi. 30 minutos después, nos encontramos frente a frente con “Al Palome”, el capo mafioso del verano.

“Mire, señor, hemos estado observando que anda rondando una camioneta blindada de un banco, y curiosamente, sin custodia policial. Creo que sería una estupidez, no asaltarla.” Al capo le gusto la idea y trazamos el plan de asalto.

Emboscamos a la camioneta y tomamos de rehenes a los dos tipos que nos habían robado. Al Palome les pidió que abrieran la caja, estos lo hicieron. Pero en la caja, como nosotros ya sabíamos y los mafiosos no, no había dinero ninguno. “Esto no esta bien” comentó Palome a los recién asaltados, “En la mafia somos personas con códigos. Les prometo que si me dicen donde esta el dinero, los dejamos libres. Una mentira como que aquí no hay dinero... anula los códigos. Zapatitos de hormigón con ustedes si es así.”

Juanchi y yo, fuimos contratados por la mafia veraniega. Y un día, dando una vueltita, vimos algo que nos llamo la atención. Habían dos estatuas nuevas en una plazoleta, estatuas con rostros que resultaban familiares.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

De Película

Las cosas tranquilas, suena “Se mato” de Buitres como pudo haber sonado cualquier otra canción, dando a entender que sería un día más de lo mismo... rompen la melodía musical las sirenas de la ambulancia y de los policías.

Sales afuera sorprendido y preguntas qué pasa. Como siempre alguno de tus vecinos esta informado (el chusmerio viaja más rápido que la luz) y te cuenta que un helicóptero que llevaba a un hombre vinculado al presidente cayó en la playa y habría sobrevivido el conductor del mismo que logro escalar una barranca para poder encontrar ayuda, luego de nadar varios metros.

“¡Cosa de película!” dije, ignorando lo que se venía. A las pocas semanas un grupo de gringos llegó a la ciudad, buscando informarse sobre lo ocurrido. Averigüé que eran personas de Hollywood. Se había enterado del hecho y pensaron en llevarlo a la pantalla grande. Les hice que me pagarán un café y tres whiskys para luego contarles lo que ocurrió.

“It´s Perfect!” dijo uno de ellos. Enseguida el otro tomo su computadora personal y se dirigió al baño. Tras 20 minutos, volvió con un guión para la película. Lo leí y vi que los extranjeros con plata cambiaron muchas cosas de la historia original para intentar hacerla más interesante.

El guión contaba que ese helicóptero viajaba con un embajador del Uruguay que iba buscando la paz con Argentina, con quien estábamos en guerra por asuntos ambientales. Pero la paz no le era conveniente al Ministro de Guerra quien se había asociado a un grupo de traficantes bandeirantes neo-nazis, por lo que derribaron el helicóptero en pleno vuelo.

El piloto se enteró en el aire. Sobrevivió al ataque y nado 50 Km con un menisco roto debido a una lesión en la adolescencia que no le permitió llegar a ser estrella de football americano. Luego de sortear tiburones y manta-rayas de tres metros, llegó a la costa.

Una vez en tierra, debía escalar barrancas cuatro veces más altas a las que existen en realidad. Pero a la vez, resistiendo al frío de la nieve, consecuencia de un duro invierno. Una vez en la cima se encontraría ante una base militar. Para entrar, lucho contra 50 hombres armados y entrenados, perros hambrientos y tuvo que seducir a la hermosa hija del Ministro, al cual vencería al final.

Será un gran éxito de taquilla, porque el nombre que se maneja para el papel principal es el de Steven Seagal, aprovechando que ya grabó un filme con historia que se lleva a cabo en Uruguay... pero en un Uruguay que ni los uruguayos conocíamos.

viernes, 27 de agosto de 2010

Autobiografía en Tercera Persona

Ferguson Mojarra, nació mientras sonaba “La 9º sinfonía” de Beethoven, tras un parto complicado. Fue dado a luz con la ayuda de unos palitos chinos de un mikado, debido a que el único fórceps que tenía el médico se había roto. Su nacimiento se había adelantado un día, debido a que no fue tomado en cuenta que en los años bisiestos se tiene un día de más. El propio alumbramiento se dio en un campo cercano a la ciudad de Libertad, era el tercer hijo de una madre soltera de descendencia británica.

Siendo un hombre de pleno siglo XX, creció en el medio rural a la sombra de sus hermanos Harrison y Morrison, quienes eran más capaces en el trabajar en el campo. Esto llevo a que Ferguson sea visto como la “oveja negra” en la familia. De cualquier manera, esto no afectó en él y siempre se concentro en sus estudios. Tanto que fue alumno destacado al nivel primario y secundario. Sin embargo, conocía a su peor enemigo de toda la vida, a Adolfo Lennon, un gordito que siempre andaba de morral y que a pesar de ser niño tenía bigote desde los cinco años. Este maldito niño fue estigma de Ferguson, y desde jardinera hasta que termino de recibirse de bachiller, tuvo que pagar el tributo diario de su merienda, un “Martín Fierro”.

Característica distintiva de Ferguson fue que a pesar de crecer en el campo del Uruguay, conservó costumbres inglesas de sus antepasados. Nunca se le pasó un té de las cinco, se vistió siempre de manera elegante e intentó pronunciar un español muy correcto, debido a que el inglés, a pesar de todo, no fue su fuerte.

Ya joven adulto, se mudó a la capital buscando escapar al trabajo rural. En la ciudad fue tratado como un “canario del interior”, convirtiéndolo en una persona aún más aislada que antes. Por lo que, Ferguson lo utilizo como una oportunidad para estudiar el comportamiento humano.

Para sobrevivir, ganaba dinero escribiendo cuentos basados en lo que veía, los cuales se lo vendía a niños pequeños o a algún periódico. Aunque de vez en cuando hacía mandados a señoras veteranas que temían salir de su casa. Estas le pagaban con el vuelto recibido de las compras.

Tras leer variados panfletos y libros de historia se convirtió en seguidor de la Escuela Bakuninartiguista. A la vez que cursaba la licenciatura en Ciencias de la Comunicación, dónde empezó a escribir historias y panfletos revolucionarios hasta su muerte en Chernóbil, cuando intentó calentar un malvavisco en un reactor nuclear. Murió ahogado en merengue.

(Autobiografía de Ferguson Mojarra. Su muerte aún no esta comprobada. Según los críticos, se dice muerto para vender más)

miércoles, 11 de agosto de 2010

Sí, a la tecnología en el Truco

Con el Audiomóvil, pasando la canción “Yummy, Yummy, Yummy” de Ohio Express de cortina para un comercial sobre el próximo torneo de truco a disputarse en un conocido bar del lugar, comenzó todo.

Para el día del torneo, un éxito en inscriptos, colmando ampliamente las expectativas. Tanto que lograron que un canal de televisión comprara los derechos a emitir el torneo.
La primera fase no trajo grandes sorpresas pasando de ronda los más veteranos y viejos hombres de bar. Mientras que jóvenes parejas que hacían su primera experiencia cayeron claramente derrotados, pero marcando un camino en su vida a seguir, sabían que dentro de unos años eran ellos quienes iban a estar del lugar del ganador, quienes aprenderán todas las grandes tretas del Truco y quienes desperdiciarán su vida tirados en una mesa de un bar, mamados hasta que la pensión y la jubilación no les diera para seguir.

Como dije, una primera fase sin grandes sorpresas y sin ninguna polémica que acotar. Como fue casi en todo el correr del campeonato, hasta que llego la final. Por un lado la pareja integrada por Gerardo Pascual y Martín Bergérez, y por el otro, Enrique Cósero y Martín Buchichio.

El torneo lo gano la primera pareja nombrada, pero trajo cola. Repasando las imágenes que grabaron en la TV se nota claramente ciertos momentos en donde la pareja ganadora usaba técnicas fuera del reglamento para ganar la partida de Truco.

Al parecer, mientras uno barajaba las cartas antes de repartir, su compañero aprovechaba la distracción para robar unos porotos y ponerlos en su montón del puntaje. Otra infracción sucedió dos veces que cantaron mal los tantos de envido, cuando realmente sus cartas en la mano no sumaban eso. Pero el error más grave, fue en una mano que cantaron el “Vale cuatro” después de que ellos mismos habían sido quienes dijeron “Retruco”.

Esto trajo la polémica de que si se debiese integrarse la tecnología a los encuentros de Truco. Hasta ahora la FITTA (Federación Internacional de Truco, Timba y Asociados) se ha plantado claramente en contra de la tecnología apelando a que distorsionaría la esencia del juego. Cuando en realidad la tecnología iguala a todos y da garantías a que las potencias no abusen de aquellas parejas con menor poder dentro del régimen truquero.

De cualquier manera, la FITTA públicamente pidió disculpas a Cósero y Buchichio por la estafa sufrida, por intermedio de su presidente, Joseph Dunbar.

martes, 3 de agosto de 2010

La Previa: Vecinos de Satán vs La Manada Mecánica

Dentro de poco sonaría el “Ameno” de Era. El final del mundo se presentía. No porque los digan los aztecas, ni Nostradamus, ni Chuck Norris. ¡No! Se presentía porque se venía el gran clásico. Y todos sabemos que en el mundo redondo con costuras, el antes de un clásico, se vive como el final de los días.

Se acercaba partido entre “Vecinos de Satán” y “Manada Mecánica”. Dos entidades con distintos ideales, contrarias historias y odio mutuo.

Estos dos equipos, además de identidades deportivas se presentan como religiones y tendencias políticas. Por un lado, La Manada, representante de la “Verticalidad Natural”, muy unido a los ideales dictatoriales y subordinamiento, con cero democracia y atención a que los seres aptos para mandar son quienes nacen divinamente para ello. Su gran momento en el plano deportivo fue cuando a Tarzán lo nombraron Rey de los Monos, donde consiguieron dos quinquenios y tres ensaladeras de La Pasiva. No usan números en su uniforme, sino letras del abecedario griego. Una debe pertenecer siempre al capitán, a quien ellos llaman, “Macho Alfa”

Los Vecinos en cambio, defienden la idea del Infundamento Político, algo que hasta hoy en día no ha sido explicado. Pero en el plano divino son grandes seguidores de la Iglesia Artiguista. Tanto que antes de cada cotejo deportivo, prenden una vela debajo del monumento al prócer en la plaza de Libertad.

Una semana antes del choque, la gente pide licencia, menos los baristas. La multitud enloquece. Todas las personas que caminan por la calle miran con actitud sospechosa al otro, buscando saber por quien simpatiza. Los hinchas de un equipo se mudaban al sur, los del otro al norte. El registro civil no daba abasto con la cantidad de personas que le querían cambiar el apellido a sus hijos debido a que es un deshonor que llevarán el nombre familiar si hinchaban por el otro.

La ciudad sera un caos hasta el día del partido, que las almas lo disfrutaban como si fuera el último. El libertinaje se abrirá paso. Los heridos de muerte a consecuencia del evento, morirán en las calles porque los hospitales no abrirán sus puertas, muy probablemente, sus funcionarios se reportarán enfermos por el partido. Los policías ya están usando sus armas para enfrentar a sus compañeros seguidores del rival, hasta se dice que soltaron a un preso peligroso que comparte la pasión por los mismos colores.

A la hora del partido, seguramente no habrá ni un alma en la calle. Bares llenos, casas en donde los sillones pasarán a ser asientos de cine para ver el partido en el LCD. El estadio sin embargo se espera un vacío total. Se dice que los hinchas de Los Vecinos habían comprado todas las entradas correspondientes a La Manada, y estos habían hecho lo mismo.

Muy pronto sabremos el resultado final de este gran match, que seguramente cambiará la historia.

jueves, 29 de julio de 2010

El Colorado de la Plaza

Justo cuando escuchaba “Waiting for the worms” de Pink Floyd, arrecostado al sofá, pensando que sería un día lindo para descansar y no hacer nada, tirarse simplemente a pensar en uno mismo mientras hacia una linda tarde de verano, recibo una llamada a mi celular. “Hey, tengo una promesa interesante para ti”, me levante y fui a ver a esa promesa de la que me hablaron.

Soy Ferguson Mojarra, cazador de talentos. Pero, no me dedico a los talentos del fútbol ni de la música. Me encargo de conseguir talentos políticos. Soy el que recorre el Uruguay buscando a las personas más carismáticas e iniciarlos en la vida política. Yo los encuentro, se los presento a los partidos, y estos por supuesto me pagan el trabajo y cobró un porcentaje de los votos que reciban las listas donde figure mi hallazgo. Yo sé, antes que cualquiera de ustedes, quien va a ser la próxima figura política, yo forje a Wilson, yo amaestre a Sanguinetti, yo le enseñe a Tabaré a crear sus mejores frases.

Y aquí estaba otra vez, en medio de una plaza, esperando ver y distinguir a la próxima figura del Uruguay. Cuando enseguida la note. Era un niño, entre cinco o seis años, con pelo largo y colorado. Llego en bicicleta justo a las siete de la tarde como me habían dicho que siempre lo hace. Luego de dar unas vueltas alrededor de la manzana, estaciono su vehículo y encaro al centro de la plaza con una capa de Batman puesta. Allí se encontraban chicos de su edad y algo mayores jugando al fútbol, él se interpuso en el partido, tomo la bola bajo el brazo y ninguno de los otros niños le protesto. Lo reconocían como líder. Dijo unas palabras y se armó un nuevo encuentro. Fue cuando me di cuenta el por qué de la capa, él era el capitán del cuadro, era el Rey de la plaza. Varias personas de distintas edades lo conocían, todos hablaban de él, era un personaje con carisma.

Una madre de un niño grita que era hora de irse, el chico se iba a ir y fue él, el caudillo de cabello rojizo a enfrentarlo y decirle: “En el fútbol, los de afuera son de palo. Deja que yo me encargo”. Le hizo una señal a la madre para que aguante un ratito, paró el partido y se dirigió a sus compañeros de juego: “el que hace el gol gana”. Así fue.

Atónito a ver todo eso, cuando el Colorado se retiro en su bicicleta con rueditas de la plaza, tomé mi celular, marque un número del directorio y cuando me contestaron dije: “Magurno, tengo la clave del reflote de tu partido”.

domingo, 25 de julio de 2010

Brasilero de campo uruguayo

“Uruguay 1 Brasil 1” del Cuarteto de Nos, era la canción que justo estaban pasando en la FM cuando yo me encontraba por entrar a ese boliche de una pequeña ciudad del interior. Me acode a la barra y pedí una grapa con limón.

En el boliche no habrían más de seis personas sin contar al cantinero. Por supuesto, cada uno cumpliendo su rol en boliche del interior. El dormido en una mesa, bien a lo mamado de antes, que no armaba lío, se agarraban los tales pedos pero no molestaban a nadie, simplemente si les pegaba para arriba decía uno o dos chijetes (“tonterías” para los citadinos de la capital) y se quedaba dormido. También estaban los cuatro que jugaban al truco con muestra, como se debe. Y el que cae a leer el diario o simplemente estar atento a todo. Por supuesto, yo era el que estaba acodado a la barra.

Me parecía raro que faltase el empalagoso. Hasta le iba a preguntar al bolichero, cuando entra un brasilero meta a gritos.

Pidió una grapa y llamó la atención del lugar. “¿No vieron a una mulher, muito bonita, pero muito bonita pasar?”. “Era mí mulher, la estoy buscando”. Hicimos gestos que daban a entender que no la vimos.

De cualquier manera, al brasilero le dieron ganas de quedarse y como buen brasilero con un ego más alto que la Torre de los Homenajes del Estadio, se le dio por contar su día. “Eu me levanté hoje, e no la vi. Entonces la salí a buscar, me cruce kilómetros de campo para llegar aquí, todo caminando.” Empecé a notar a ciertas caras del lugar que ya lo veían mal al brasilero. “Mientras venia para acá, me cruce en el camino con una víbora. Pero eu no le tengo miedo a las víboras, por eso la tome viva y la guardé en el bolsillo”.

“¡No mientas!”, grito un paisano del truco, mientras otros dos le decían que se calmara, y el restante le miraba las cartas. “Eu no miento, mira”. El brasilero metió la mano en el bolsillo, y de repente le cambio la cara a una que expresaba dolor, pero sin sonido. Saco la mano y de su dedo índice tenía a la serpiente prendida. “Que bichito malo” fue lo único que dijo.

Ahí salte yo y le dije que tenía que ir a ver a un médico. Pero el brasilero se negaba, que no era nada. Fue cuando me dirigí al bolichero y le dije que había que llevarlo a un hospital. El bolichero me hizo una mueca de que el se encargaba, se metió a la despensa, y sacó un disco de pasta que colocó en el reproductor. En eso empezó a sonar un relato de un partido de fútbol. Era la voz de Don Solé, relatando los goles del Maracanazó. El brasilero se dio cuenta de ello y se retiro caliente.

Al rato, cayó una mujer, fea pero fea y pregunto si no habíamos visto al marido.

sábado, 17 de julio de 2010

Una pareja y Uruguay entre los cuatro mejores

"Naranjo en flor" era el tango que ambientaba en ese bar, cuando me reuní de pura casualidad con Mercedes Landriscina y Luis Vigil, una pareja del interior que hace poco ya se encontraba viviendo en la capital debido a su edad. Ya jubilados ambos, siempre es bueno tener servicios cercanos, evitar largos viajes que serían si siguieran viviendo en Caracú Quemado. Además, los hijos y gran parte de la familia ya estaban en la capital.

Observábamos como la gente estaba feliz por el buen desempeño mundialista de Uruguay, como los jóvenes esbozaban sonrisas y se enloquecían de alegría con un Uruguay entre los cuatro mejores. Señale por la ventana a un botija con la cara toda pintada celeste y blanco, comente: "Que hermoso sería volver a vivir este sueño de todos desde la fantasía de un joven." Enseguida noté que Luis y Mercedes se miraron y expusieron una sonrisa cómplice.

"¿Qué significa esa risita?". Y ahí me contaron una historia. Todo empezó cuando Espárrago anotaba ante los soviéticos y metía a Uruguay entre los cuatro mejores del mundo en el Mundial de México 70. "Ese día le pedí la mano a Mercedes" dijo Luis. Ella no respondió ese día. Llega el partido en donde Uruguay era derrotado contra el "Mejor Equipo de la Historia", el Brasil de Pelé, Jairzinho, Tostao, Rivelinho, unas fieras. Los llantos de Luis al lado de la radio ese día, pasaron a sonrisas cuando Mercedes de la nada le dijo: "Sí, acepto casarme contigo". La boda, por supuesto, fue realizada el día de la derrota contra la Alemania Federal por el tercer y cuarto puesto.

Ese mismo día eligieron que la Luna de Miel, sería ir a ver a los jugadores cuando regresasen de México. Como no tenían mucho dinero, no vieron Luna de Miel más simbólica que esa. Entonces aprontaron el viaje, tomaron el ómnibus a Montevideo un día antes del arribó. Se quedaron en un hotel y al otro día irían a ver a los jugadores llegar.

Dos horas antes del arribó, tomaron un taxi que lo llevaría a su destino. Luis llevaba su Spica que relataba que la selección ya estaba por llegar. Fue cuando el taxi se detuvo, bajaron y vieron poca gente. Pensaron que se debía a que no vinieron con la copa, por eso no habrían tantos seguidores. La Spica empezó a relatar la llegada del plantel, Luis y Mercedes miraban para todos lados pero no veían a nadie. Todo muy quieto. Mientras la radio decía: "He aquí los players que llegan con un honroso cuarto puesto, lo vemos pasar por la aduana del aeropuerto".

Fue cuando a la pareja les cayó la ficha, ellos habían ido al esperarlos a puerto.

miércoles, 14 de julio de 2010

¿Paranoico?

Escuchaba tranquilo la canción “We Are The World” de Michael Jackson, cuando se daba la alarma de que la gripe porcina entraba en el Uruguay. Ese problema que al parecer era algo lejano, tanto que lo más cerca que podíamos tenerlo era México, había llegado a este país pequeño, libre de aftosa.

Ya no hay caso, el mundo se nos va de las manos. Claramente veo como estuvo a punto de suspenderse las clases y realizar un Toque de Queda en donde nadie, absolutamente nadie pueda salir para evitar contagiarse y contagiar. A punto estuvimos de realizar un estilo de paro general que casi arruina nuestra débil economía y nos dejaba en bancarrota como nación. Siendo solo los comerciantes de tapabocas los que aprovecharían la situación para hacerse ricos y convertirse en la clase dominante de nuestra sociedad.

Y saben quiénes son los culpables de esto, los terroristas. Son ellos los que inventan estas bombas para tirar y matar gente. Sí, Sí, son ellos. Como tienen perdida la cabeza. Cada vez es más sorprendente la maldad del ser humano.

¡Ojo! No es lo mismo este ataque de los terroristas con el del 11 de setiembre. Aquel no fue tal, en verdad fue el gobierno estadounidense que mato a su propia gente para después poder atacar y quedarse con el mundo. Además de que en ese momento probaron un ataque aéreo, pero ahora tienen una nueva arma que genera terremotos y fue clarito que la probaron en Haití.

Pero igual, los peores son los europeos. Porque tienen una mezcla de los dos, atacan con un virus (que igual se les fue de las manos) para extinguir a todas las personas en el África y después quedarse con sus recursos. ¡Exacto! Los europeos soltaron el virus del SIDA en el continente negro para eliminar por completo a toda su población, ¿por qué creen que el 50% de la gente africana sufre de SIDA? Porque el maquiavélico plan está resultando.

Bueno, ahora mejor cierro la boca. Hay mucha gente nueva en mi ciudad y esas caritas me miran mal. Deben ser enviados del servicio secreto soviético. Sí, la caída de la URSS es toda una mentira, van a volver, van a volver más poderosos que nunca.

No lo olviden, calienten el agua antes de usarlas. La actual Intendencia está poniendo productos químicos para que la voten. Les hace la cabeza, ¿por qué creen que no dura nada un calefón en Libertad City? A mí no me vengan con el cuento del sarro.

domingo, 11 de julio de 2010

Para ser Espía: "Cultura Mundo"


Escuché "Judy is a punk" de los Ramones, y no sé por qué, me acordé de O.G. Peninball Paiva (1873-2003). Agente secreto de la CIA hace varios años, tal vez, el más grande de todos los tiempos. Lo más seguro que no lo conozcan, lo que quiere decir que hizo su trabajo bien. Varias veces operado para verse joven y congelado en la segunda guerra. Entre sus hitos fue quien entreno a James Bond y Mata Hari (exnovia), dividió Checoslovaquia, encontró a Mussolini, a Wally y el talento de J. K. Rowling, además de evitar la guerra civil argentina de los ´90 (Peronistas vs. Peronistas, no se conoce el hecho, porque lo evito).
Un “Maestro del Disfraz”. Fue tan bueno que hasta creo un método actoral, en el cual explicaba como enrolarse en el personaje. Cuando lo invento, estaba en una misión con el nombre: Stanislavski. Era tan bueno, que engaño a los propios masones, integrando una logia sin ser invitado. Para entrar en el personaje, estudiaba la cultura con la cual coincidía el perfil.
Su fin llega de la manera menos pensada. En una misión buscando desbaratar un plan católico-terrorista-jesuita (que consistía en la destrucción del Castillo de Piria en Uruguay, por sospecha de que allí se realizaba Magia Negra Tupamara Republicana Legal) tuvo que contactarse con los líderes terroristas haciendo pasar por Osvaldo Jorge Pérez Washington; un paisano tradicionalista mercenario de derecha.
Su contacto con los malhechores tenía que ser llevado a cabo en una pequeña localidad. Libertad, era el punto acordado, más específicamente en un bar céntrico. La hora pactada era las 17, pero nuestro espía llega a las 18 para no levantar la sospecha de que no era uruguayo. Los tres terroristas católico-jesuitas y Peninball se sentaron en una mesa contra la ventana. En la primera media hora, no se hablo más que del Maracanazo, Gardel, la vuelta ciclista y de las tradicionales divisas. Para más tarde pasar a una partida de truco (con muestra), dónde nuestro espía gana con inteligencia y hasta conociendo las señas del mismo; cabe decir que tenía un “bastillo” bajo la manga.
La cosa venía bien, pero O.G. Peninball Paiva cometió el único error en su vida. Llega el mozo preguntando que se iban a servir los señores. Los terroristas pidieron un whisky, una grapa con limón y un vino lija. Nuestro espía, con la intención de seguir pasando desapercibido como un oriental más, señala al mozo y ordenó:
-Un mate... con hielo
Lo fulminaron con un Rémington en ese mismo momento.

miércoles, 7 de julio de 2010

El problema del Football


Mientras sonaba “Feo, Fuerte y Formal” del cantante español Loquillo, me disponía a buscar unos papeles que necesitaba. Los había dejado todos juntos en un lugar fijo en el living de la casa, los fui a buscar y no estaban. Me enloquecí, los busque por todo alrededor sin éxito. Me rendí y le pregunte a mi vieja si ella los había sacado. “Sí” fue la respuesta, los había sacado porque en ese lugar no quedaban lindos. ¡MALDITA SEA LA ESTETICA! Vamos a la realidad, lo lindo no es lo mejor. Las cosas hay que usarlas por lo práctico, no porque se vea bello.

Ahí, damas y caballeros, está el problema del fútbol. Hoy en día no hay jugadores, hay maricones que pellizcan la pelota en vez de darle con el siempre efectivo “puntazo”. Está demostrado que desde que apareció el mercado del fútbol, ha desaparecido el buen fútbol. Todo esto por culpa de jugadores como el inglés Beckham, tipo que no salta a cabecear por no despeinarse, tipo que no corre por miedo de que se le entrevere el perfume con el sudor. Ya desde ahora lo digo y ya lo han dicho anteriormente, los grandes jugadores de antaño o eran feos o se veían feos.

Los jugadores jóvenes de hoy le dedican más tiempo a pasarse la planchita que a la práctica del remate con el empeine. Promesas que podrían llegar a grandes cosas arruinan su carrera por querer ser lindos. Por eso propongo: a los futuros cracks quitarle de la concentración los perfumes, afeitadoras, acondicionadores, cremas para el acné, gel, etc. Y en el caso de que por esas cosas de la naturaleza se vean bendecidos por la belleza física, hacerle crecer el bigote. Advierto esto porque luego de pasar los 23 años el jugador se pierde, si no se le empieza a tratar desde antes terminaremos con otros Rubén Olivera, Horacio Peralta, Nicolás Vigneri.

Un alto, un grito de desprecio, una advertencia de posible atentado contra jugadores que arruinan al fútbol como fútbol, y a cambio nos entregan esas pasarelas en campos verdes. Un muy gritado mátenlos a: Beckham, Figo, Raúl, Guti, Ballack, Torres, D´Alessandro, Márquez, José Paolo Guerrero, Sergio Ramos, Gago, Gilardino, L. Figueroa, entre muchos otros. Tipos que hacen creer a la gente que juegan bien porque son lindos. ¿Cómo logran esto? Gracias a que todos los dirigentes y técnicos están comprados por las marcas deportivas para que pongan a jugar a los lindos en los puestos en que se destaca el jugador (volante ofensivo o delantero) y ponen en los puestos de golpeadores al primer feo que pase por enfrente de la casa del contratista, tipos que no tienen ni idea ni motricidad para practicar tan bello deporte. Estos son los casos de Silva Cantera, “Ruso” Pérez, D. Tomassi, “Marito” Álvarez, etc.

Párense dando el más fuerte de sus aplausos para los jugadores feos pero lindos. Esos tipos que no le importa la moda, que no le importa el vello facial, ni su hedor, esos jugadores que son capaces de hacerse el peor corte de pelo que le queda horrible, esos que se dejaban el bigote al estilo Jorge Guinzburg, esos que no se arreglan la dentadura, esos que no le importa que se note la accidental quemadura sufrida de chico. Esos, esos verdaderos futbolistas porque no le importa cómo se vean físicamente pero sí que queden bien con la pelota en los pies, que quede bien la jugada, que se gane a lo lindo. Un fuerte aplauso para los: T. West, Jay Jay Okocha, Pablo García, Rivaldo, Puskas, Vampeta, Tevez, Schubert Gambetta, Riquelme, Diego Dorta, Gullit, Higuita, Garrincha, Valderrama, Biyik, F. Rincón, J. Nasazzi, Rocha, Sócrates, Pele, Zamorano, Etcheverry, Alexis Lalas, entre muchos verdaderos grandes del fútbol mundial.

domingo, 4 de julio de 2010

¿Y si se lesionaba Forlán?

Me acosté a dormir con “Las cuatro estaciones” de Vivaldi, tarde en la noche. Luego de ver el informativo en donde mostraban que el plantel uruguayo que nos representa en esta Copa del Mundo se había ido un ZOO, a jugar con los animales, tocar a los leones chicos y todas esas cosas que hacen los famosos que por ser famosos tienen libre acceso.
En una de esas muestran a nuestra figura, goleador, diez, delantero, ambidiestro y “Dios”, Diego Forlán. El rubio se encontraba jugando con dos cachorros de leones con una pelota de football. Una linda pelota que acá debía salir un huevo y la tenés guardada en tu cuarto porque no querés que se rompa jugando en el hormigón. ¿Dónde quedaron los campitos?
Hasta que en un momento, uno de esos leones pequeños, se paso de rosca y ataco a nuestro jugador, mordiéndole y prendiéndose con sus poderosas y jóvenes garras en la gamba derecha de Forlán. Sacándole un pedazo.
Tras el hecho, la prensa internacional se enloqueció... ¡y ni te digo la uruguaya! Todos pidieron la cabeza de Tábarez por la mala idea de llevar a los jugadores a ese paseo como bien maestro de escuela, en vez de hacerlos practicar football.
Se acercaba el partido con México y a todos se nos había caído abajo el ánimo. Miraríamos el partido desde el Uruguay con las banderitas y pancartas que decían: “Fuerza Diego”. Ese día, el encuentro arranca en simultaneo con Sudáfrica y Francia. Para peor, nos llegaba la noticia que Francia salió a jugar con tres puntas, sus tres goles y que el “Puma” Anelka seria el portero. Ya no les importaba el mundial.
El minuto a minuto desde el otro partido, era desalentador. El primer tiempo ganaba Sudáfrica seis a cero. Mientras que nosotros empatábamos en tablas, y los chicanos como buenos traidores no querían empatar, por más que clasificáramos los dos, y salían a atacar.
Cerca del final del partido, Sudáfrica ya llegaba a las dos cifras de goles y deseaba que se convirtiera alguno en nuestro partido. Pero hasta ahí, entre Muslera y Lugano, nuestro arco seguía invicto.
Fue cuando faltando un minuto para el cierre, el “Ruso” da un mal pase atrás y deja mano a mano al Guille Franco contra el arquero celeste. El mexicano va a definir y le pega espantosamente a la pelota yendo a las manos de Muslera. Pero la en-jabulani, hizo un extraño efecto que se le escapa al meta uruguayo. Suavemente parecía entrar al arco, todos nos agarrábamos la cabeza, los chicanos empezaban a gritar, las vuvuzelas a sonar...
Y me desperté de la pesadilla.

jueves, 24 de junio de 2010

El Fantasma del Rey

Bajo era el volumen de “Barbara Ann” de los Beach Boys que sonaba en mi equipo de audio mientras yo dormía placidamente en mi cama. Un día normal, estudio, trabajo y mate. No había nada nuevo a la vuelta, cero expectativas para un cambio drástico, que de última, no precisaba. Todo estaba bajo control.
Ya de madrugada, el espejo de mí recámara empezó a emitir luz propia, una luz blanca muy fuerte. Enseguida de la luz, comenzó a sonar un sonido familiar, era música, era el tema “My Way” que lo conocía por Frank Sinatra, pero esta vez era otra versión, por otro sujeto.
De la misma luz empezó a resurgir la figura de un hombre, más correctamente de un exhombre, Era un alma en pena, un fantasma de, al parecer, un hombre muerto, que por cierto, parecía sobrepasado de peso. Además vestía una chaqueta de cuero, pantalones abiertos al final, cinturón con una hebilla llamativa y lentes de sol. También un peinado voluminoso en donde se destacaba una especie de jopo y patillas largas.
Tenia una voz espectral pero muy agradable, también una mirada que apelaba a la seducción y cuando flotaba en el aire lo hacia con movimientos rígidos pero nunca duros, acompañando a la perfección la música que salía desde el espejo.
“Soy El Rey, y vine desde el más allá para que me ayudes a nunca ser olvidado. Puedes pasar a la historia, hijo. Necesito que vuelvas a hacer grande mi música y recuperar esa esencia perdida del Rock & Roll. Hoy falta emotividad verdadera, apego a lo que se canta, lo que se trasmite” me dijo el espectro mirándome fijamente (sus palabras fueron en inglés, la traducción fue hecha por el traductor de Google). “Además serás recompensado, puedo concederte fortuna, fama y las más hermosas mujeres. ¿Me ayudaras?”.
Hasta ahí yo me encontraba muy asustado, pero tome fuerzas y salte de la cama. Agarre el tarro de fly y el encendedor que siempre dejo al lado de la cama por si entran ladrones o extraterrestres a mi cuarto, y amenace al fantasma gritando enfurecido que se vaya. Este se fue por donde vino con cara de decepcionado.
¿Quién se cree que es ese fantasma? Como si yo fuera tan idiota para caer en su treta. Si sabré que Pelé es negro, esta vivo y no canta, juega al fútbol. ¡Que Rey ni Rey!

martes, 22 de junio de 2010

Clase de Lingüística


Tarareaba “California” de Lenny Kravitz cuando entraba a clases el profesor de Lingüística. Y cada vez se me hacía más lejano la melodía de la canción, mientras él llegaba con su maletín, sus hojas y su micrófono para dar la clase a un número gigante de alumnos que ponían la más grande variedad de expresiones de “te detesto” mientras él caminaba como en cámara lenta, confiado hacia una especie de tarima donde se colocaría para dictar la clase.

Hoy en la entrega de los “Aburrimientos Awards” tenemos los tres nominados al premio mayor, el “Hay que tener Huevos de Oro”. Los posibles ganadores son:
-Un partido por octavos de final de Tenis masculino
-Fiesta sin alcohol en la casa de tus suegros
-El profesor de Lingüística

El ganador es: ¡El profesor de Lingüística!

Por su pedante forma de hacer más aburrido lo aburrido. Por tan solo pararse en la tarima de la clase y hablarle al micrófono con su voz, en cierto tono “maricón”, hablando sobre los singulares y plurales. También, por parecerse a Lafaussi y por mucho más, es el claro ganador.

Señores, pasa una mosca. Aplausos, alegría. ¡Hay vida fuera del salón! Hasta ahora el único movimiento que he visto, desde que tengo clases de lingüística. Pensar que en la primera clase me senté adelante y se notaban los movimientos de la boca del profesor. Y en la parte derecha, donde se juntan los labios, se iba formando un estilo de “suflé de baba” que crecía cada vez más. Se agrandaba, su anchura era cada vez mayor. Esa bola de baba con cada abrir y cerrar de boca aumentaba en tamaño, iba a explotar. Comparado con “eso”, perdí el miedo a la guerra nuclear y a los robots con inteligencia artificial. Maldita sea, ¡va a explotar!... ¡Uh! Menos mal que se pasó la lengua, que desastre se ha evitado, el mundo tal como lo conocemos estuvo cerca del final.

Pero sigo aburrido, no sé qué hacer. Tal vez si empiezo a inventar historias donde le vea la cara a Dios para quedar como un winner se me pase el tiempo. No, mala idea, hace tanto que no se la veo que me siento virgen de nuevo. Ya sé, hora de enviar sms a la gente amiga, para ver cómo andan, que cuentan, para salir del contexto aburrido. “Hola, como tas? Q se cuenta?...Mensaje Imposible De Enviar. ¡Nooooooooooo! No lo soporto más, me voy, me voy de clases. Bueno, me paro. Intentando salir en silencio, listo, ya casi llego a la puerta, si tengo la perilla, la giro. Soy libre, que hermoso día. Hora de esperar el bondi.

¡Oh! Unas lindas chiquilinas en la parada, ¿de qué hablarán?
-¡Ay! Sí, vos vistes, que cosa más boring esa clase de historia. Que me importa lo que pasó en Francia y lo que haya dicho ese Rosseau.
-¡Uh! Si, Flopi, el profe es cualquiera.

Mi pensamiento: “Baby, you are so baby”

jueves, 17 de junio de 2010

¿Y vos quién sos?


Escuchaba “Guitarra Negra” de Alfredo Zitarrosa mientras viajaba a Pelotillehue invitado por Juan Carlos Bodoque quien necesitaba de mis conocimientos en periodismo para un trabajo que estaba realizando. Acepte la invitación porque quería conocer la ciudad de Condorito y comprobar si realmente la sopa siempre viene con moscas en el Restaurante “El Pollo Farsante”.

Mi viaje embarcaba un ómnibus desde Santiago hasta Buenas Peras, y de ahí me tomaría otro colectivo para Pelotillehue. En Pelotillehue me esperaría Bodoque. El viaje fue completamente normal, con lo de siempre en cualquier ómnibus que traslade pasajeros: las dos o tres personas que apenas saliendo de Santiago ya iban a cada rato al baño, el niño que vomita, el viejo que ronca y la guacha divina que esperabas que se siente a tu lado pero se sienta justo en el asiento detrás tuyo.

Ya arribado en la terminal de la ciudad, me baje tranquilamente con mis cosas y no logre encontrar a Bodoque, no lo visualizaba por ninguna parte. Por lo que, decidí esperar unos minutos para ver si el conejo periodista aparecía. Pasaron más de diez minutos y el infeliz no daba señal alguna. No soy un tipo paciente, debo admitirlo, entonces me dio la loca y salí a dar una vuelta por vuelta (vale la redundancia).

Me compre un refresco Pin (“tomé Pin y haga pum”) y recorrí algunas cuadras cerca de la terminal de ómnibus. “¡Ferguson!” escuche un grito en el aire. Me dije interiormente: “¡Ta! Es Bodoque”. Pero la voz no parecía la de él. “¡Fergu!” otra vez el grito. Hice un giro de 180 grados y vi la figura de un individuo que levantaba la mano como saludando. “¿Y vos quién sos?” me preguntaba interiormente, pero de cualquier manera yo no respondía el saludo, no podía sacar quien era esa figura que me saludaba. “¡Fergusooooon!”, seguía insistiendo el tipo, entonces si debía ser un saludo para mí. Además, tengo que admitir que no tengo un nombre común, Fergusons por la vuelta no hay muchos que yo sepa. Si me dijera que me llamo Juan, José, Facundo o Martín, otra seria la historia.

Entonces levante la mano respondiendo el saludo, fue cuando el tipo expandió sus brazos y vino corriendo como para darme un abrazo. Todavía no podía averiguar quien era pero también extendí los míos para aceptar el abrazo. De última era un abrazo, no me estaba pidiendo plata. El señor se acercaba con sus brazos abiertos y cuando yo ya estaba dispuesto a la recepción... siguió de largo. Se saludo con otro tipo parado unos metros detrás de mí.

Si hubiese estado en mis pagos, creo que hubiese quedado regalado, pero estaba en tierras extranjeras, por lo que, disimule que me estaba desperezando y seguí mi camino. Pronto me encontré con Juan Carlos.

miércoles, 9 de junio de 2010

PRIMERA INTERNACIONAL RELIGIOSA


“Christmas” de The Who era el ringtone que tenía en el momento para atender la llamada entrante en mi celular. Era un amigo (muy creyente él) que decía que se acercaba el Apocalipsis, que los párrocos, sacerdotes y curas del mundo blasfemaban contra el poder divino.

Bueno, la cosa al parecer fue la siguiente, los empleados de Dios habrían creado sus distintos gremios y sindicatos por todo el globo y habrían arreglado para formar la Primera Internacional Religiosa. La primera reunión de párrocos representantes de distintos gremios católicos de todo el mundo.

Según Liberto Cruces, el representante por parte del Uruguay, el motivo de la Internacional es ponerse de acuerdo entre todos los empleados católicos del mundo y llevar sus protestas y sugerencias ante su patrón. Como quejas fundamentales, limitar el Poder Divino que no da garantías de no-corrupción y exige demasiada verticalidad.

“¿Cómo sabemos si hemos actuado correctamente?” es la pregunta que se hacía Cruces. “¿Qué garantía tenemos que si el día del Juicio Final nos sintamos seguros porque actuamos a pie firme según la Biblia y que al Señor no se le ocurrió cambiar algunas cosas sin avisarnos a tiempo?”. Una de las críticas al sistema divino que también se plantean los empleados de Dios, es si una vez en el cielo contaran con Seguro de Pos-vida, vivienda y atención médica, o sufrirán una estafa por parte de su patrón y deberán volver a trabajar para conseguir lo antes nombrado.

También exigen un cambio en la comunicación entre la central del cielo y las franquicias terrenales. Se quejan que el sistema de comunicación es demasiado burocrático y antiguo, por lo que el mensaje o llega demasiado tarde o no es claro. “Mensajes a través del Milagro esta abierto a ambigüedades en su interpretación, con las tecnologías de hoy no podemos permitirnos esto”.

Una información que ha llegado en las últimas horas es que los judíos y musulmanes se unirían a la Internacional buscando los mismos reclamos que los católicos y protestantes. No sería el caso de los budistas, debido a que no le interesan nada más que los dejen meditar tranquilos.

martes, 1 de junio de 2010

Mis 25 miedos:


Todas las personas normales siempre temen a algo. Los no normales tememos a más cosas. Mis distintas fobias esta sin dudas relacionadas a ciertos hechos de la infancia o de dos días atrás que se han querido ocultar en mi inconciente. Pero no lo lograron, porque a diferencia de ustedes, yo puedo leer mi inconciente.

Sí, es verdad, puedo leerlo. Hasta adivinen qué... ¿Vieron esos sueños en los cuales te despertás cuando viene la mejor parte? ¿Sí? Yo no me despierto.

Como les venía diciendo, yo puedo leer mi inconciente y encontrar los problemas que me llevan a esas fobias. Pero, al conocer los problemas y estar tan dominado mi inconciente que se mezclan con mi conciente, no puedo solucionar esos miedos, los cuales tengo muchos. ¿Estoy maldito?

A continuación la lista de miedos:

1- Las serpientes
2- Los robots con inteligencia artificial

3- Los travestis
4- Una película de Xuxa que vi de niño

5- Marilyn Manson
6- Los pases atrás al arquero

7- Los vehículos a gasoil
8- Las viejas con bastón
9- China
10- Thomas Gravesen

11- La cera para depilar
12- Las tarjetas de crédito
13- El Cáncer

14-
Las "armas blancas" (a los que las usan no les tengo miedo, no dan miedo...lo que usan si. "No me pinchen con cuchillo, pincháme con tenedor")
15- Que Dios realmente exista
16- Morir virgen
17- Lugano enojado.
18- Los cepillos de alambre
19- Los monos con navaja (En este caso le tengo miedo a la mezcla, no al arma blanca individualmente)
20- Las hornallas
21- Los números desconocidos en el captor del telefóno
22- La vida en pareja
23- Los All Black
24- Que me vendan Dunbar por Whisky
25- Stephen Hawking

sábado, 29 de mayo de 2010

Travesía

Sonaba “The Ballad Of Ira Hayes” de Johnny Cash en el “huevito” cuando descansábamos yo y mis amigos (el burro adelante) de un gran almuerzo de domingo en verano, o sea, comida a las 15 horas, un asadito espectacular, con whisky y sin mujeres. Un total cero stress. Para mejor, no habíamos reído de unos porteños que horas antes querían hacer un asado al estilo uruguayo y como no tenían ni idea como era hacerlo sin carbón, nos preguntaron. Y nosotros le contestamos: “Mira, tienes que poner la carne sobre la parrilla y la roseas con queroseno. Calcula más o menos, medio litro por kilo de carne y después prendes fuego”.

No sabemos si cayeron en la broma pero no nos importaba, hasta disfrutamos más imaginándonos a los porteños mientras seguían nuestras instrucciones. Reíamos de la maldad uruguaya y la ingenuidad turista. Pero bien, como decía, luego de un buen asado, vino una siestita... digo... vino y una siestita.

Cuando se despertó el primero hizo que lo hagamos los demás. Y nos miramos, como que nos decíamos: “hora de bajar a la playa”. No daba caminar dos cuadras para terminar bajando por una bajada rápida y fácil, como haría cualquier persona común.

Somos gente compleja, queremos aventura. Y que mejor aventura que bajar por lo que nosotros bautizamos "La Quebrada de los Cuellos". Bajada inhóspita, llena de peligros y retrasos que le sacaría a cualquiera las ganas de vacacionar.

Pero al final nos animamos, arriesgamos nuestras vidas y bajamos por ese camino roñoso y peligroso. Para llegar a la playa tuvimos que pasar por una altura memorable, cruzar escalones resbalosos, atropellar viejas que se ponían a descansar cada tres metros, huir de abejas asesinas, pelear con alacranes gigantes y aguantar mis chistes malos.

Al fin y al cabo llegamos sanos y salvos a la arena firme. Por nuestras mentes paso el no volver a subir hasta el otro día, pero pensamiento fugaz que voló al darnos cuenta que habíamos olvidado la conservadora con las cervezas arriba.

No se puede ir a tirar a la arena sin cerveza.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Chorizo Seco Fest


Sonaba “El Revoltoso” del Pájaro Canzani en mi PC, cuando me disponía a revisar mis acciones en Wall Street por internet. Estaba viendo el alza en mis plantaciones de kiwi cuando me doy cuenta que fecha era, un 29.

¡Odio los 29! ¡Día de ñoquis! ¡Puaj! Que cosa que no los puedo pasar, todos los meses llega el maldito día 29 para que se preparen una de las bazofias más grande dentro del glamoroso grupo de las pastas. Por eso febrero es un mes grosso, no solo porque yo nací en él, sino porque cada cuatro años hay un 29. ¿Por qué ñoquis? Siendo los tallarines, sorrentinos, ravioles, tortelines mil veces mejor que esos asquerosos “arruina papas”. Aprovechen bien el gran alimento, tubérculo fundamental para la economía libértense que es sin duda la papa, por ejemplo en un buen puré o en una buena y deliciosa tortilla.

Yo no como ñoquis, por lo que hoy, amigos míos, he decidido armar la marcha de fenómenos que no nos gustan los ñoquis quejándonos sobre el arruine y discriminación que sufrimos las personas que no comemos ñoquis los 29, días que tenemos que hacer un total ayuno por 24 horas. Sepan que a la marcha (por falta de propaganda) fuimos no más de cinco personas, yo y otras cuatro que querían convencerme que estaba loco, por lo que, el gobierno ni pelota dio.

Pero no soy de esos tipos de quedarse quieto, y busque una solución. Desde ahora en más todos los 29 serán fiesta para mí, pero debo elegir a algún delicioso alimento que me identifique y me haga disfrutar todos estos malditos días mientras que las demás personas, la gente común comen de esas sustancias que clasifican entre las pastas. La comida que he de elegir es el “Chorizo Seco”, y le voy a decir por qué, primero que nada porque es sabroso y segundo porque cuando les conté mi idea de la marcha a mis amigos me dijeron que era un sálame.

Así que ya saben, todos los 29 yo comeré chorizo seco con pan. Unas de las comidas más ricas del mundo campestre. Un orgullo nacional y personal. Se me hace agua la boca. Sigan con sus ñoquis, este cuerpito sabe lo que quiere.